Quiero describir mi existencia con paciencia. Quiero mi muerte como si fuese suerte. Soy tan romántico que salpico amor y perdona por mancharte con mi arte que evitastes. Mi romanticismo ofende más que nacionalismo. Mi romanticismo es un abismo de amor sobrecogedor. ¡Amor!, el sonido llena mi oído y todo mi cuerpo se estremece al verte. Este poema anatema es para ti si dices sí a mi aquí. Gracias.